La calle donde vivo es muy amplia y da el acceso a la vereda donde en realidad vivo. Esta calle se une a un gran estacionamiento del sector; este posee aéreas verdes a sus alrededores y con grandes árboles que la dan frescura a las casa.
La calle donde vivo siempre está muy concurrida por los padres de los niños que acuden al preescolar. Cada vez que allí hacen fiesta para celebrar algún evento, la calle donde vivo se llena de mucha alegría.
Como todos los días, siempre transitan los vehículos por esta calle; ya que es la única vía para llegar a la casa. Siempre los fines de semana, se estacionan los carros con sonidos a alto volumen; esto son los grupos de los jóvenes que se reúnen a compartir con sus amistades que habitan cerca de esta.
En la calle donde vivo, son muchas las casas y familias que habitan allí; somos una comunidad muy unidad, al momento de luchar por alguna injusticia que vaya a perjudicar a la integridad de algunos de sus habitantes le prestamos el apoyo. Gracias a la unión de todos los aportes económicos, se logro cerrar con rejas todos los alrededores del sector y también la entrada de la calle donde vivo; a esta entrada se le coloco un gran portón, el cual se cierra en las noches para impedirles el paso a los malhechores. Todo esto se hiso con la finalidad de protegernos de tanta delincuencia que ronda en los alrededores.
Como siempre existe en toda comunidad, en la calle donde vivo habitan en las cercanías un grupo de personas que siempre están pendiente de todos tus movimientos; te saben la hora de entrada o salida de tu casa y hasta la manera de caminar, ya que ellos viven de tu día a día.
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